A Abel Carbonell
Bochorno. En la noche cálida
el barco cruje subiendo,
y en el río va cayendo
de la luna la luz pálida.
Se abanican los palmares
en las orillas del río,
y vienen desde el bohío
del leñador los cantares.
El ocaso se arrebola
con vaga fosforescencia,
y se escucha la cadencia
de un tiple y una bandola.
Todo el barco so estremece;
y mientras la noche sueña,
con las chispas de la leña
la chimenea florece.
Doquiera, calor de horno;
vibra lejos una copla,
y ni una aura fresca sopla
de la noche en el bochorno.
Entre el verde matorral
la luz de cocuyos brilla,
y aduerme, desde la orilla,
el rumor del platanal.
Deja el barco leves huellas,
y van las chispas subiendo,
y las chispas van cayendo
como una lluvia de estrellas.
1927
Ismael Enrique Arciniegas

